Como ya os comente, tenía intención de visitar el encuentro de Cerro Muriano que se celebraba el 6 de abril de 2019 organizado por la Asociación Cruz, vuelta y cruz ayudadas por el Ayuntamiento de Obejo y Córdoba.
Durante la semana anterior al encuentro se realizaron cursos de diferentes técnicas de encaje de bolillos impartidos por Ana Isabel Madrigal, Bistra Pisancheva y Angel Sanchez.
Lamentandolo mucho, solo pude asistir a la charla que dio Angel Sanchez el viernes por la tarde sobre los diferentes tipos de encajes. Fue muy amena y enriquecedora aunque como se trata de un tema muy pero que muy amplio nos quedamos con ganas de mas porque no dio tiempo a todo. La verdad que Ángel nos desvelo unos detalles curiosos en relación al encaje y la pintura.
Lo que si me quedo claro es que durante siglos el encaje además de formar parte de la vestimenta, era la prueba visual de la posición económica y de poder de las personas de clases altas. Y aunque en la actualidad ya no es así, alabo a las personas y países que apuestan por defender y preservar este bello arte.
De izquierda a derecha: Elena López, Ángel Sánchez, Mamen Pozon Martín-Castaño, Ana Isabel Madrigal y Bistra Pisancheva.
Antes del inicio de la charla pude apreciar con detenimiento los cuadros de Bistra que allí tenía expuestos. No os podéis ni imaginar que imaginación y destreza tiene esta mujer. Y por supuesto las fotografías no hacen justicia a estas obras dignas de ser expuestas en el mejor museo. Si os fijáis en la imagen de su bolillero, además de ser pequeño, veréis que su patrón consta de unas lineas que ella misma se dibuja. Lo dicho, un artista que en lugar de pincel utiliza hilos y bolillos.
Lo bueno de estos encuentros es siempre saludar y conocer a las maravillosas personas que disfrutan de este bello arte que es el encaje de bolillos. Charlar y darnos la oportunidad de sacar nuestras propias impresiones sobre las personas que a veces juzgamos solo por oídas de personas no siempre con buenas intenciones, porque aunque a través sobre todo de facebook nos relacionamos con muchas personas, siempre es una ilusión cuando podemos abrazar y conversar con esas personas cara a cara. Muchas gracias por todos vuestros abrazos y palabras maravillosas. Sé que no le puedo caer bien a todo el mundo pero me alegra ver que si le caigo bien a muchas personas.
Durante la semana anterior al encuentro se realizaron cursos de diferentes técnicas de encaje de bolillos impartidos por Ana Isabel Madrigal, Bistra Pisancheva y Angel Sanchez.
Lamentandolo mucho, solo pude asistir a la charla que dio Angel Sanchez el viernes por la tarde sobre los diferentes tipos de encajes. Fue muy amena y enriquecedora aunque como se trata de un tema muy pero que muy amplio nos quedamos con ganas de mas porque no dio tiempo a todo. La verdad que Ángel nos desvelo unos detalles curiosos en relación al encaje y la pintura.
Lo que si me quedo claro es que durante siglos el encaje además de formar parte de la vestimenta, era la prueba visual de la posición económica y de poder de las personas de clases altas. Y aunque en la actualidad ya no es así, alabo a las personas y países que apuestan por defender y preservar este bello arte.
De izquierda a derecha: Elena López, Ángel Sánchez, Mamen Pozon Martín-Castaño, Ana Isabel Madrigal y Bistra Pisancheva.
Antes del inicio de la charla pude apreciar con detenimiento los cuadros de Bistra que allí tenía expuestos. No os podéis ni imaginar que imaginación y destreza tiene esta mujer. Y por supuesto las fotografías no hacen justicia a estas obras dignas de ser expuestas en el mejor museo. Si os fijáis en la imagen de su bolillero, además de ser pequeño, veréis que su patrón consta de unas lineas que ella misma se dibuja. Lo dicho, un artista que en lugar de pincel utiliza hilos y bolillos.
No se el numero de encajeras bolilleras y demás personas (porque también habían personas bordando tul y otras labores de hilo) asistieron, pero habían muchas y eso que la lluvia no se quiso perder este gran evento.
Puestos de venta habían también bastantes y como buena bolillera, y a pesar de que tengo armarios llenos de patrones y demás, pues también me compre alguna cosilla. Hay que recordar lo bien que lo he pasado en estos días, y que mejor manera de recordarlo que trabajando patrones con estupendos bolillos, jajajajaa.
No me quede a comer, a pesar de que lo que estaban preparando olía muy rico, porque como os he comentado, llovía y hacia bastante frío, por lo que no queríamos emprender el regreso a casa muy tarde.
Aquí os voy a dejar un vídeo recopilatorio de algunos momentos del encuentro que además de conversar y conocer a personas maravillosas, también incluía un desfile y actuaciones de bailaoras. Espero que lo disfrutéis.
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